aiguadeplanxa

He visitado Sonimag. La Fuji nueva y poco más. Un salón de segunda o tercera división. Fontcuberta con sus cosas. Mas interesantes en los 70 que ahora. (Pero esto es una opinión personal). Lo que más me atraía era ver alguna foto nueva de Joan Colom. Están bién, aunque me transmiten una mayor amargura que las que realizó en su primera época. Será el signo de los tiempos. O que nos hacemos mayores. Lo que me ha parecido muy lamentable es el revelado, que seguro que ha confiado en terceras personas. Creo que Colóm sigue usando película. La mayoría de las copias tienen un ruido digital impresentable y, en algunas, hay solarizaciones y posterizaciones que dudo que Colóm deseara. Una verdadera pena que no merece un fotógrafo como Colom. Un cero a los responsables del revelado y al comisario de esta exposición. Lamentable. Compensamos con una de las imágenes mas icónicas de la exposición de Colóm

Son fotografías de un colegio sin alumnos. Sin nadie. Solo ocupado por el ojo del fotógrafo que recuerda su infancia, en un colegio como este. Y que tiene la posibilidad de revivirlo. La puerta cerrada vista desde dentro. La antesala del despacho del director. Que miedo sentíamos esperando que nos recibiera. Vigilados por la la secretaria de edad incierta que mostraba su reprobación tras unas gruesas gafas. El patio. Donde se forjan amistades que perduran. Había mucha complicidad entre los niños a la hora del recreo. El largo pasillo. A un lado la orla de generaciones pasadas. Al otro la exposición de trabajos manuales. ¿A quién no le llamaron la atención por bajar saltando las escaleras? La sala de profesores. Allí se hablaba, tal vez, de nuestro futuro.

Seguimos con la serie.